La lactancia y lo que no nos cuentan


Durante el embarazo normalmente tomamos la decisión sobre el tipo de alimento que daremos a nuestros bebé, hay mujeres que desde el principio tienen clarísimo que darán fórmula, algunas lactancia mixta y otras pecho… 
Yo les contaré mi caso…
Mientras estaba embarazada me informé muchísimo sobre los diferentes tipo de lactancia y tenía bastante claro que si yo podía dar el pecho esa iba a ser la forma en la que alimentaría a mi bebé.

Cuando Norah nació tuve la suerte de poder hacer el piel con piel, una sensación mágica y con ella darle la libertad de oler y acercarse a mi pecho de manera intuitiva, es maravilloso el ser humano y esa conexión mamá, bebé. Norah se agarro al pecho y con la ayuda de la matrona me vi dando el calostro a mi bebé de manera cómoda y natural

Durante los días en el hospital dar el pecho me iba resultando una sensación extraña pero maravillosa, hasta que llegamos a casa y entonces comenzó mi batalla…

Los que me conocen saben que soy una persona particular y estaba claro que mis tetas no iban a ser menos…

Como todas sabrán en los comienzos para dar el pecho la leche sube de manera espontánea hasta que con el paso de los meses estas subidas se regulan y la leche sólo sube cuando el bebé está mamando, bueno pues en mis primeros meses con Norah mis pechos generaban tal cantidad de leche que me estaba desesperando, pasaba noches en vela por el dolor, se me generaban perlas de leche, algo que duele muchísimo, se te crea un bulto gigante dentro del pecho por un conducto congestionado, esto aveces se ve, es lo que llaman perlas de leche porque se ve un punto blanco en el pezón y en otro casos no se ve. A mí al principio no se me veía nada solo me notaba unos bultos enormes dentro de la mama que me desesperaban, había leído que lo mejor cuando eso ocurre es pegar al pecho a tu bebé para que elimine esos bultos, claro que pegar a tu bebé hacía que generases más leche así que me veía en un bucle muy extraño y muy desesperada. 
Norah empezó a agarrar mal el pezón porque el pecho se me ponía realmente duro y a los bebés les cuesta mucho hacer un buen agarre estando el pecho tan congestionado, así que aparecieron las grietas en los pezones, unas grietas tan enormes que mi pezón derecho se quedo con una cicatriz, hoy la miro con orgullo pero en su momento hacía que dar de mamar significase llorar. Imaginen que panorama, noches sin dormir, Javi poniéndome calor y dándome masajes porque yo era incapaz de tocarme mis pechos enormes y llenos de heridas qué hacían que Norah mamase leche y sangre… un espectáculo.

Una noche empece a tener un dolor insoportable que me hizo terminar en urgencias con un principio de mastitis que con antibiótico controlé
Después me hice una experta y sabía identificar cada dolor, incluso aprendí a sacarme las perlas de leche.
Yo seguía con una cantidad de leche bestial y con los pechos muy inflamados siempre por los bultos así que llame a una doulas, que me salvó la vida. Su nombre es Tatiana, (si quieren contactar con ella déjenme un comentario). Ella vino a casa y me enseño cómo agarrar mi pezón para que mi hija tuviera un mejor agarre y así poco a poco Norah y el sacaleches que se convirtió en mi fiel amigo, acabaron con los bultos de las mamas.
Para mí haberla conocido fue un antes y un después con mi lactancia, siempre me animó a seguir, me ayudó con todas mis dudas y además me escuchó pues no olvidemos que el momento emocional post-parto es duro.

La cantidad de leche no desaparecía y aunque Norah comía muchísimo yo tuve que aprender a hacer un banco, el primer cajón de mi congelador solo estaba lleno de bolsas de leche, una leche super amarilla y con una cantidad de grasa bestial.
Me contaron que mi abuela que tuvo 7 hijos, bastante seguidos, amamanto a todos más a unos niños que eran sus vecinos con lo que supongo que si lo de la leche se hereda yo salí a mi abuela, como me llama mi madre, una vaca lechera.

No se pueden imaginar cuantas veces flaquee y pensé, voy a quitar el pecho, duele mucho, no puedo con esto y cuando empece con el tema de la Pbo de Norah todo se me estaba haciendo un mundo. He de decir que el único problema que me genero la Pbo a la hora de amamantar es que su brazo no podía colgar por debajo de mi axila, se lo tenía que doblar sobre su pecho y pegarla a mí de frente, ya les contaré el momento escayola y pecho. 

Muchos fueron los comentarios de déjalo ya, pásate a los biberones, esto es un sacrificio, también me dijeron que la teta es ser esclava de un bebé, que te condiciona para todo, escuche que mi bebé lloraba porque no le estaba alimentando (con la analítica que le realizamos a Norah ella estaba genial pero tenía colesterol, a lo que el pediatra me dijo que lo que significa es que mi leche es bien buena) chicas la leche se genera de la sangre así que mientras corra sangre por las venas hay leche una leche que nutre e hidrata… Bueno yo me hice siempre la sorda a estos comentarios y a pesar del dolor y el mal estar seguía queriendo dar el pecho y lo conseguí, a día de hoy no me arrepiento de todos los momentos duros que me hicieron conocer mejor la forma de alimentar a Norah, conocerme a mi y conocer a mi bebé
Yo no cambio por nada la conexión con mi bebé en el momento de dar el pecho.

Hoy sigo con lactancia materna exclusiva, ya todo se ha regulado y les puedo decir que amo dar el pecho, mi consejo si quieren dar pecho no se rindan, es un
vínculo maravilloso.

Comentarios

  1. Ojalá logré más tiempo del que pude darle a mi primer hijo! Eres una crack. Luchadora, valiente, eufórica, pero siempre muy tú desde que te conozco. Te quiero mi peligrosa. Jamás cambies y gracias por tantos momentos y tantas horas de conversaciones y charlas productivas que me has concedido la vida al conocerte. Besos.

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